Sueño bastante curioso sobre un eclipse en Maracay y un aparecido llamado Miguel

Antes de comenzar pido disculpas por no haber escrito post desde diciembre pero he estado en otros proyectos webs en los cuales he aprendido cosas nuevas (manejar SEO principalmente) ya que a inicios de año me patrocinaron hospedaje web y dominio y tuve que comenzar de cero con WordPress prácticamente pero ya pasada esa etapa vuelvo nuevamente a dedicarle líneas a este blog que en lo personal lo considero bastante interesante!, ahora bien volviendo al tema en sí, hoy tuve dos sueño bastantes «peculiares»: uno sobre un eclipse en una playa de Maracay (que a la final resultó ser una luna de sangre) y un aparecido que se llamaba Miguel.

Eclipse en Maracay

Lo primero que me llamó la atención (no en el sueño sino cuando desperté) es que en el sueño me encontraba en Charallave pero eso pertenecía a Maracay (es sabido que Charallave es del estado Miranda, pero en el sueño quedaba en Maracay), yo me encontraba en una playa que había en dicha localidad (otra peculiaridad ya que en Charallave no hay playas!), era de noche y cuando miré hacia arriba había un eclipse, o eso pensé yo al principio, en dicha playa había olas, pequeñas pero habían, en eso llega una persona que yo conocía en el sueño pero que obviamente en esta vida nunca lo he visto y me reta a surfearlas, yo me negué en ese momento y me dispuse a caminar por la orilla de la playa, de pronto hacia el horizonte había un sol que quería salir pero que la gente no lo dejaba salir porque explotaban fuegos artificiales sobre el. Luego de eso miré la luna eclipsada y cuando volví a mirar hacia el frente para seguir caminando apareció un señor de edad avanzada y me decía de que eso que observaba en la luna no era un eclipse normal sino una «luna sangrante», yo le comentaba que una vez soñé con un eclipse en la guaira y a las pocas semanas sucedió la tragedia en dicho estado, el se sonrió y me dijo que debía irme de allí y de que pronto los pasos que daré serán tan vivos como una llama, cuando emprendí nuevamente el retorno del camino observé que cada paso que daba dejaba una llama encendida, me llamó mucho la atención e inclusive me metí en la playa y ni eso lo apago, me sorprendió mucho eso. Luego me volví a encontrar con la persona que me había retado y acepte, lo curioso fue de que hacía bodyboard en la ola y de pronto la playa se había separado repentinamente por un malecón pero yo lo había saltado de una ola a otra ola que estaba en el otro lado de la playa. A la final salí de la playa y le devolví el bodyboard al surfista diciendo algo así como «reto superado» y me había ido del lugar.

Un aparecido llamado Miguel

Este fue muy corto pero me llamó mucho la atención, estaba en mi casa y había una reunión, luego de mucha conversación yo había salido a una pequeña terraza despejada que hay en donde vivo y mire hacia arriba, había una luna llena pero esta era inmensa y se veían inclusive muchos detalles de los cráteres de ese satélite de la Tierra, lo curioso era que uno de sus polos estaba iluminado, una luz muy intensa, tras la luna se veía como si hubiese otro planeta, cuando me dispuse a decirles a los demás a un lado de la terraza había una persona vestida de blanco, le pregunté quien era y me respondió: «¿quién crees que soy?» yo en seguida le dije «Miguel» y me dijo «¿cómo lo sabes? y yo le dije «Intuición», él me dijo que confiara mucho en mi intuición. Por cierto este aparecido llamado «Miguel» era de un aspecto vikingo, tenía inclusive el pelo rojo y largo con algunas clinejas y hablaba en tono que me recuerda bastante a como hablan los alemanes en español, él me dijo «ve y diles a los demás de que aprecien la luna en todo su esplendor antes de que amanezca porque ya son mas de las 5 de la mañana», en eso cuando me dispuse a decirle a los demás, desperté.

Deja un comentario